Visita la exposición de los proyectos ganadores de Inéditos 2021

La Casa Encendida acoge del 28 de mayo al 19 de septiembre la vigésima edición de Inéditos, muestra que reúne los proyectos expositivos de los jóvenes comisarios ganadores, menores de 35 años.

Inéditos cumple 20 años como uno de los pocos programas de España que fomenta la inserción de los jóvenes comisarios en los circuitos profesionales, facilitando a los seleccionados y seleccionadas la posibilidad de producir su primera exposición y editar un catálogo del conjunto de la muestra. Fundación Montemadrid ha apoyado a más de 50 comisarios noveles, contribuyendo además a la publicación de los catálogos y a la difusión de sus trabajos.

Los dos proyectos ganadores de esta edición han sido seleccionados por un jurado formado por Elvira Dyangani Ose, directora de The Showroom (Londres); Álvaro Rodríquez Fominaya, director artístico del C3A (Córdoba); y Sergio Rubira, comisario independiente.

El primero de ellos, titulado Contemplar una superficie inestable y comisariado por Ignacio de Antonio Antón (Madrid, 1985) y Julián Pacomio (Mérida, 1986) es una propuesta donde confluyen prácticas expandidas de la coreografía, la performance, el cine y las artes visuales. También es un horizonte inestable, un flujo de corriente y circulación, donde lo coreográfico aparece en la relación con las piezas y con quien recorra la exposición; lo performativo se sitúa en el párpado, en la inclinación del cuerpo al dirigir la mirada.

La exposición pretende ser un paisaje hecho en conversación con artistas nacionales e internacionales que indagan, desde hace años, en la coreografía y la performatividad —en sentido expandido— como parte de su trabajo.

El segundo proyecto, Pasados-presentes para un contexto afectivo, comisariado por el colectivo Conjuntos Empáticos [Sálvora Feliz (Ourense, 1986), Marta Benito (Madrid, 1993), Noemí Díaz (Madrid, 1996)], plantea la arquitectura como situación social, como mediadora o interfaz entre la realidad cultural y social. De aquí parte para proponer una situación expositiva en la que se engloban una serie de obras que, de alguna forma, se adelantaban a su tiempo o bien a la fugacidad con la que vivimos, las desplazaba automáticamente al pasado, casi como si fueran caducas antes de haberse concluido. Y, sin embargo, ante el contexto que vivimos en este último año, pueden ser recuperadas, mostrándonos soluciones pasadas que están más presentes que nunca.