Así de rotundo ha sido el lema de la convención Social Capital Market (SoCap09) celebrada en San Francisco (EEUU) a comienzo de este mes: El mundo ha cambiado.
«Nuestro sistema financiero ha sido sacudido hasta la médula. La creencia en la rentabilidad como único aspecto para medir el rendimiento se ha visto cuestionado. La percepción de riesgo ha cambiado para siempre. Nuestra economía se está refundando»
SoCap09 ha reúnido a una variedad única de innovadores del mundo social, inversores, donantes, empresarios y líderes de pensamiento, con el objetivo de buscar el sentido de estos tiempos difíciles. Cómo las tendencias y acontecimientos de nuestro tiempo están ayudando a dar forma a un nuevo mañana.
La conclusión general de este año es que la crisis mundial financiera ha puesto de relieve hasta qué punto el ámbito de la empresa social ha madurado en el último año. No obstante se ha coincidido en los cinco aspectos que aún frenan o impiden la plena implantación de este tipo de empresas en el mercado mundial:
Métrica: Es la otra cara de la madurez. Para que la empresa social termine de dar el salto es necesario que se «conecte» al mercado real. Encontrar puntos de conexión de referencia entre su desempeño social y su desempeño financiero. En este sentido se considera que el Golbal Impact Investing Rating System (GIRS) puede convertirse en una interesante y práctica plataforma.
Inversiones de alto riesgo: Es un tipo particular de inversión (riesgo financiero elevado en la etapa inicial de la empresa). Para crecer es necesario reconocer y regular las fuentes de capital de riesgo extremadamente alto en las etapas tempranas de las empresas con beneficios sociales, pues los innovadores tienden a crear grupos sin fines de lucro (donde se pueden aprovechar donaciones de amigos y familiares) y esto puede llevar a verdaderos dramas (pues aumenta el riesgo en las empresas para-sociales).
Rendimiento económico: lograr alterar los modelos y estructuras existentes para obligar a los actores tradicionales a unirse a la materia. No son muchas las empresas sociales que lo están logrando (FrontlineSMS, BetterWorldBooks, Virgance). En general son necesarios más modelos verdaderamente perturbadores si se aspira a un cambio radical. Para que una empresa social logre atraer la atención necesita un rendimiento que doble al de sus competidores…
Incentivos a empresas de beneficio a corto plazo: Consecuencia del capitalismo moderno, se incentiva el rápido beneficio de la explotación a corto plazo en lugar de la sostenibilidad a largo plazo. Cómo cambiar estos incentivos es una pregunta aún abierta y desafiante. Pero mientras la economía siga recompensando la explotación a corto plazo y nuestros valores sociales no proporcionen suficiente contrapeso en contra de ella, no se llegará muy lejos.
Poder Político: Una de las preguntas más interesantes que han surgido en SoCap09 es si el ámbito de la empresa social ha perdido la oportunidad de empujar la agenda más a fondo en el momento de la crisis. Las instituciones económicas-sociales aún no están lo suficientemente desarrolladas como para adquirir influencia política.