
Hemos hablado con varias organizaciones humanitarias, como Afrikable y Alianza Solidaria, para preguntarles cómo les afecta la crisis en sus programas vacacionales y, aunque en nuestro país el número de voluntarios comprometidos con la acción social se mantienen o incluso aumenta, como asegura Cruz Roja, en el extranjero, que es el tema que nos interesa en este blog, dicen nuestras fuentes que:
Debido al precio de los viajes que tienen que costearse nuestros voluntarios por falta de presupuesto de las ONG, las personas que deciden dedicar sus vacaciones a ayudar a los demás fuera de nuestras fronteras ha disminuido
De hecho, la coordinadora del programa ‘Vacaciones Solidarias‘ de la organización Afrikable, María del Mar García, nos explica que su programa de voluntariado que se desarrolla en Kenia ha notado este año los efectos de la crisis y alude como causa a que el propio viaje a este país africano es “muy caro”. En este sentido, nos aclara que:
Ir a Kenia cuesta alrededor de 1.700 euros entre la estancia y el viaje. El propio voluntario es el que tiene que pagárselo porque nosotros no podemos asumir ese coste como ONG que somos y, por lo tanto, esa cantidad supone un desembolso importante para mucha gente en época de crisis
García también señala a la inestabilidad laboral como factor negativo para decantarse por realizar un voluntario vacacional como el de Kenia, porque resulta que “muchos de los interesados no disponen de tres semanas de vacaciones, que es el tiempo que pedimos para este tipo de proyectos».
Menos mal que pese a la crisis económica que estamos viviendo en Afrikable sí han conseguido ocupar todas las plazas que la organización ofrece para los voluntarios en los últimos años. En realidad “son pocas”, alrededor de 85-90 en 10 meses, y, por lo visto, al ser Kenia un país muy interesante donde además el voluntariado se compatibiliza con hacer turismo, nos señalan, la gente, por lo que se ve, se anima con el programa de esta ONG de cooperación. Menos mal.
Sin embargo, sabemos también de otras quejas. Hay más ONG que ven que la gente se decanta cada vez menos por las vacaciones solidarias a pesar de su carácter salpimentado con el aventurero, necesario o recomendable en estos casos. Así, desde Alianza Solidaria, que también desarrolla un programa con este tipo de vacaciones en países como Bolivia, Ecuador, Haití, Nicaragua, Senegal, Gambia o Guinea Bissau, suman como dato a este tema de la crisis y el voluntariado en el extranjero que, efectivamente, a ellos también les afecta porque “si en la edición del año 2012 participaron un total de 17 personas, este año se las están viendo y se las están deseando para cubrir las plazas”.
Por lo visto, según denuncian desde esta ONG:
La disminución del número de personas interesadas en irse de voluntario a los países más pobres se debe a que en 2012 la organización asumía el coste de la compra de los billetes de avión
Lástima no haberlo sabido antes. Nos habríamos ido con ellos. Mira que hemos pensado y repensado apuntarnos a uno de estos proyectos de vacaciones estivales solidarias verano tras verano. Pero, ciertamente, el coste nos echaba para atrás estación tras estación. ¿Y a quién no? Bueno, a unos cuántos no. Y eso, sinceramente, nos alegra. Sin embargo, debido al presupuesto con el que cuenta actualmente la Alianza Solidaria afirman que:
No podemos asumir ese coste y por eso ahora la persona interesada es la que debe asumir la compra del billete de avión
Y porque no siempre todos corremos la misma suerte ante iguales vicisitudes, por su parte, Ayuda en Acción, será por la reputación, no sé, no aprecia esta caída de voluntarios españoles en el extranjero. Según su portavoz, Francisco Carril:
Desde que empezó la crisis en el año 2008, la cantidad de personas que viajan ha aumentado notablemente a pesar del coste, que ronda los 1.600 euros. A nosotros la crisis no nos ha tocado el voluntariado
Suerte la suya que, encima, según nos añade Carril, no sólo no les afecta el panorama económico sino que en los últimos años han tenido que aumentar las plazas de voluntariado debido a la demanda. No obstante, también confiesa que pese a este dato positivo, no llegan a cubrir todas las plazas. Paradójicamente, el portavoz de Ayuda en Acción no dejar de hacer hincapié en que:
El número de voluntarios en España se ha mantenido
Y es que, efectivamente, resulta que en los últimos datos presentados por la ‘Plataforma del voluntariado: «el número de voluntarios en España ha crecido un 20%” y el interés por estas prácticas altruistas ha tenido un aumento superior en dos segmentos de la población, los que se encuentran en situación de desempleo y entre los jubilados. En ambos colectivos se puede apreciar que quieren aprovechar su tiempo libre para ayudar a los demás.
El voluntariado de la acción social
Según el informe, el voluntariado entre jóvenes esta cada vez más extendido. Y aunque saltemos del voluntariado de cooperación al de acción social, están íntimamente relacionados y no podemos terminar este artículo sin resaltar que resulta que son los jóvenes uno de los recursos más valiosos del voluntariado de las ONG porque “sin ellos no se podrían realizar muchas actividades”.
Y es que, según los datos de este estudio, en España las personas voluntarias dedican una media de cinco horas semanales a colaborar con la organización elegida y prefieren las áreas de discapacidad e infancia y lo hacen por identificación con una causa, creencias personales, deseo de participación y satisfacción de expectativas personales. Da igual. Todo vale si se trata de ayudar al prójimo y se consigue.
Por último, según Cruz Roja, su número de voluntarios ha aumentado un 5% desde el comienzo de la crisis debido a la conciencia social que ha despertado las diferentes situaciones de desamparo que sufre parte de la sociedad española.
Pues con crisis o sin ella, mantengamos nuestro espíritu solidario, nuestra fuerza de voluntad, nuestra compasión y nuestro tiempo ayudando a los que lo necesitan tanto fuera como dentro de nuestras fronteras. A pesar de la crisis, qué orgullosos nos sentimos de que haya personas que realicen el voluntariado que realicen y se deba al motivo que sea. En el extranjero o en España. En cualquier caso benefician y se benefician, crecen personalmente y reportan a la sociedad algo que ella les ha dado. A todos… gracias.