Los factores psicológicos, más importantes que los síntomas motores en la vida laboral de una persona con párkinson

Los factores psicológicos, más importantes que los síntomas motores en la vida laboral de una persona con párkinsonEl abandono del mundo laboral y la necesidad de dejar el trabajo son algunos de los factores que afectan, en mayor medida, a las personas que padecen párkinson a una edad temprana. Convivir con esta enfermedad en el entorno laboral puede resultar difícil y algunas personas deciden ocultarla mientras que ésta no se haga evidente. El trabajo para una persona joven implica independencia, sentirse útil y un medio de ingresos económicos. Por ello, un gran número de personas con párkinson siguen trabajando una década o más después del inicio de los síntomas de la enfermedad, entre los cuales la gran mayoría trabajaba a tiempo parcial. Esta alternativa puede ser una estrategia de éxito para la prolongación de su vida laboral.

Un estudio en el que participaron 1.400 personas con párkinson y 1.100 personas sin la enfermedad revela que los afectados en edad de trabajar presentan un mayor riesgo de insatisfacción y que este problema, no solo está relacionado con las consecuencias financieras, sino con la calidad de vida. Encontrar una situación laboral en equilibrio con las capacidades de cada persona parece ser más difícil de alcanzar para las personas que padecen la enfermedad de Parkinson.

Un grupo de investigadores de Baltimore ha intentado identificar los factores que más influyen a la hora de abandonar la vida laboral en los afectados de párkinson. Este es el primer estudio que investiga estos aspectos de forma prospectiva, y que incluye datos recogidos por médico y por paciente. Tras estudiar durante 3 años a 1.522 pacientes de párkinson, 224 personas habían finalizado su vida laboral, de ellos el 67 % por jubilación, el 26 % por incapacidad y el 13 % por pérdida de empleo. El principal hallazgo de la investigación es que el nivel de salud y bienestar mental, incluyendo los factores psicológicos que contribuyen a la calidad de vida relacionada con la salud, tienen más influencia a la hora de determinar la probabilidad de abandonar el trabajo que los síntomas puramente motores del párkinson. Un mayor nivel de depresión, ansiedad y afectación del bienestar mental fueron los factores relacionados con la enfermedad que predecían mejor el abandono del trabajo por cualquier motivo. De hecho, y de forma sorprendente para los investigadores, la intensidad de síntomas motores no se asociaba como motivo que justificara la salida del trabajo en el análisis estadístico.