El lema del Día Mundial del Alzheimer de este año es: “Alzheimer, un reto compartido”. El Ministerio de Sanidad y Consumo trabaja en su parte de la tarea y una de sus últimas actuaciones, según ha anunciado el ministro Bernat Soria, es la elaboración de una guía de práctica clínica sobre la enfermedad para conseguir una atención de calidad a estas personas.
El texto, que quiere estar listo en un periodo máximo de 18 meses, servirá para actualizar las innovaciones existentes en torno a la dolencia procedentes del conocimiento científico. Además será el diagnóstico precoz uno de los «puntos cruciales». Y es que, según los expertos, las lesiones neuronales del Alzheimer aparecen mucho antes de los síntomas.
No está de más decir que, aparte de estas iniciativas, a la Administración Pública –Gobierno y Comunidades- le queda todavía mucho por hacer por estas personas. Especialmente mejoraría mucho su atención si mejorase la coordinación de los dispositivos públicos de asistencia y los interminables trámites administrativos para poder acceder al sistema nacional de la dependencia.
El ministro de Sanidad ha admitido que hay que revisar, antes de lo establecido, la ley de dependencia y, por su lado, el presidente de la Confederación Española de Familiares de Enfermos de Alzheimer (Ceafa), Emilio Marmaneu, urge a la revisión ya que, aunque la ley es buena, «hay aspectos mejorables» como el de los trámites administrativos, que ahora resultan «farragosos» y hay que “simplificarlos”.
A juicio de Marmaneu también hay una falta de previsión en la construcción de residencias y centros de día -muy necesarios- dentro del Sistema de Autonomía Personal y Atención a la Dependencia (SAAD):
«Ahora debería estarse preparando suelo público para
construir residencias y centros de día y yo no lo veo».
Los familiares también enfatizan en incrementar los esfuerzos en la investigación para dar pronto con un tratamiento que cure la enfermedad y no sólo retrase su progresión, que es lo único que hacen los fármacos actuales.