Teleasistencia accesible para ancianos sordos

El sistema de teleasistencia a personas mayores que viven solas resulta muy eficaz para actuar ante cualquier problema que les pueda surgir. Si bien es cierto que para que la atención sea perfecta, aún se tienen que subsanar algunos vacíos, como, por ejemplo, las dificultades de comunicación con los ancianos con sordera, algo muy común en este grupo de población.

En España, hay más de 460.000 mayores de 65 años con problemas de audición. Por este motivo, en el marco del ‘Plan Avanza’, del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, se está trabajando en un programa que solucionará los problemas que tiene esta parte de la población con los sistemas convencionales de asistencia remota.

El proyecto, denominado Telpes (Teleasistencia para personas sordas), se presentó dentro del curso de verano de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) ‘El Hogar Digital Accesible para Persona Discapacitadas’, dirigido por el profesor Miguel Ángel Valero. Además de la UPM, participan en él Cruz Roja, la Confederación Estatal de Personas Sordas (CNSE) y la Fundación Vodafone.
  
Según ha explicado Valero, Telpes, evaluado durante un mes por diez personas mayores sordas, integra luces, vibraciones y sistemas de videollamada y de videointerpretación con lengua de signos, con lo que permite a los ancianos con problemas graves de audición beneficiarse de la teleasistencia como lo hace el resto de la población a la que va dirigido el servicio.
  
La iniciativa, desarrollada ya en sus tres cuartas partes, pretende «resolver el problema de la teleasistencia inaccesible» a las personas mayores sordas, que según el Instituto Nacional de Estadística (INE) son un total de 463.990, aunque no todas precisarán de este servicio por no vivir solas.
  
Para ello, el usuario dispone de una unidad de videollamada conectada a la televisión que le permite comunicarse con las personas de Cruz Roja a través de lengua de signos, si la conoce, imágenes y pictogramas sencillos diseñados para tal efecto.
  
Para terminar de probar y evaluar este sistema, un total de 30 personas de Madrid, Valladolid, Zaragoza y Valencia lo utilizarán el próximo mes de septiembre y, si todo va bien, la idea «es que forme parte de la teleasistencia real”.