Saber envejecer. ¡Cómo nos cambian los años!

Portada del manual '¡Cómo nos cambian los años!Cuando se llega a una edad madura es importante seguir activo, no abandonarse a la depresión del paso del tiempo, y llevar a cabo hábitos saludables para prevenir la dependencia. La Obra Social Caja Madrid y la Sociedad Española de Geriatría (SEGG) han editado una serie de manuales (descargables en PDF, pincha aquí) con consejos prácticos para envejecer con salud. Son muchas las recomendaciones, por lo que desde este blog vamos a ofrecer una serie de post que las aborden con el objetivo de fomentar el envejecimiento activo en las personas mayores. ¡Comenzamos!

¡Cómo nos cambian los años! Uno de los primeros pasos a seguir es saber aceptar los cambios –en el cuerpo, en las relaciones, en el estilo de vida-, porque la eterna juventud no existe y hay que entender que vivir es envejecer y también cambiar. Según destacan los expertos:

«No existen soluciones mágicas, vamos a envejecer lo queramos o no, pero en nuestra manos está poder hacerlo en mejores condiciones de salud y bienestar».

En primer lugar, la vejez no es una enfermedad, así que no hay que sentirse enfermo por tener muchos años. Es más, el envejecimiento no trae obligatoriamente la dependencia, lo que sí ocurre es que con el paso de los años podemos volvernos más frágiles. Así que, si alguien echa la culpa de lo que te pasa a la edad… ¡Rebélate! ¡Dí que no!, subrayan los especialistas.

¿CÓMO CAMBIAMOS?

Nuestro cerebro, como el resto del cuerpo, cambia, por lo que las reacciones pueden ser más lentas. Ésto se puede compensar estimulándolo con actividades como la lectura, el estudio, los crucigramas, recordar la lista de la compra de memoria…

Con los años también aumenta un poco el peso, la musculatura se debilita, nos hacemos más rígidos y se pierde elasticidad. Así que ¡no te abandones!, con un poco de ejercicio físico –siempre bajo control médico- y una alimentación sana te sentirás mucho mejor y mejorará el funcionamiento del tu corazón y tus pulmones. También es normal notar un cambio en la textura, apariencia y color de la piel y algo de perdida de pelo (o mucha). Entonces, es muy importante la hidratación, usando una crema hidratante y sobre todo bebiendo agua.

RELACIONES

Y si el cuerpo cambia, igualmente lo hacen las relaciones. Los expertos consideran que es normal notar en las relaciones sexuales cómo el cuerpo funciona de forma diferente y se producen algunos cambios como sequedad vagina en las mujeres y dificultad de erección en los hombres. Pero, no hay que preocuparse, porque estos problemas hoy tienen fácil solución, sólo hay que consultarlo con el médico, el cual no se extrañará si se le plantea alguno de estos problemas.

¡Ya sabes, está en tus manos envejecer en plenitud!  Sigue los consejos, relaciónate, la soledad no favorece en absoluto; y convéncete de que eres capaz de hacerlo.