Danza, fotografía, diseño, creación digital, ingeniería electrónica o genética son ejemplos de estudios poco convencionales que el nuevo modelo de universidad a la carta ha transformado en grados superiores o carreras universitarias reconocidas en todo el Espacio Europeo de Educación Superior.
La tradición familiar, la vocación, las profesiones en auge y las salidas profesionales suelen ser los factores que el preuniversitario tiene muy en cuenta a la hora de elegir una carrera, pero ahora con el nuevo modelo europeo tendrá más para elegir al ampliarse el abanico de posibilidades.
La oficialidad de la que podrán gozar estos estudios les ofrece más posibilidades laborales y más reconocimiento, ya que la categoría de título propio que tenían antes no era suficiente para competir en prestigio y oportunidades con los estudios universitarios tradicionales.
Algunas facultades ya han dado un paso adelante apostando por estas disciplinas, ya que para estos centros supone una oferta novedosa que los diferencia de las demás universidades.
Es el caso del proyecto pionero de Diseño de Videojuegos de la Universidad Camilo José Cela; el grado de Ciencias de la Danza de la Universidad Europea de Madrid; o el grado de Gestión Aeroespacial que ofrecen la Universidad Politécnica de Cataluña y la Universidad Autónoma de Madrid, entre otras.