Inaugurado en Madrid un centro pionero para rehabilitar a personas drogodependientes

Usuarios del centro de rehabilitación Padre Garralda en la entrada del mismo
Fotos: Chiara Cabrera

Hoy se ha inaugurado en Las Tablas (Madrid) un centro de rehabilitación pionero ya que prestará una asistencia integral con novedosos tratamientos de deshabituación y programas de reinserción social a personas drogodependientes, en su mayoría sin recursos, que desean recuperar el control de sus vidas y todo lo que han perdido por culpa de las drogas como su familia, sus amigos, su hogar y en definitiva su vida.

El nuevo recurso, que cuenta un equipo multidisciplinar de expertos, es una realidad gracias a Obra Social Caja Madrid, la Fundación Padre Garralda-Horizontes Abiertos y el Ayuntamiento de madrileño.

El Consistorio ha cedido el suelo para edificar el centro, “uno de los más avanzados de España” y construido arquitectónicamente “para curar” gracias a la inversión de 2,65 millones de euros aportada por Obra Social Caja Madrid en el marco del programa ‘Centros Singulares’. La Fundación Padre Garralda-Horizontes Abiertos, sobradamente conocida por su larga experiencia en la integración social de personas en exclusión social, lo gestionará.

 

Foto de familia de la inauguración del centro
Foto: Chiara Cabrera

 

Al acto de inauguración han asistido el Padre Jaime Garralda y María Matos, presidente de honor y presidenta actual de esta Fundación, la Infanta Doña Pilar de Borbón, el presidente de Caja Madrid, Rodrigo Rato, el alcalde Alberto Ruiz-Gallardón, y la secretaria General de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, entre otras personalidades.

DISEÑADO PARA CURAR

El centro está diseñado a medida para que los usuarios convivan en un ambiente que fomenta una actitud positiva frente al tratamiento. Así, proporciona una estancia confortable con espacios amplios y luminosos, habitaciones comunes donde compartir experiencias con otros compañeros, evitando en todo momento que el paciente afronte su cura en soledad.

Tal y como ha explicado el Padre Garralda:

“Para este tipo de pacientes la soledad es mal enemigo y peor consejero, por ello hemos apostado por habitaciones comunes de dos o cuatro camas y un amplio programa de talleres de todo tipo que les abre a su intercomunicación”.

“Trabajamos -añadió- para que los pacientes vayan subiendo uno a uno los peldaños de los escalones que le llevaron a la ruina: autoestima, responsabilidad, amigos, familia, personalidad, trabajo, hogar”.

Vista general del Centro de Rehabilitación Padre Garralda
Foto: Chiara Cabrera

 

Ubicado en el distrito de Fuencarral-El Pardo, en un terreno de 7.500 m2, cedido por el Ayuntamiento de Madrid a través de su programa ‘Red de Suelo Solidario’, el nuevo centro cuenta un total de 80 plazas. Está distribuido en cuatro sectores independientes: zona de residencia con una unidad de desintoxicación con 20 plazas, una comunidad terapéutica con 20 plazas y una unidad de reinserción con 40 plazas. Se estima que anualmente atenderá a 341 personas con problemas de drogodependencias.

Además, cuenta con espacios de uso general donde se desarrollan las actividades en grupo, así como talleres, sala de motricidad, un gimnasio, pistas deportivas, zona de huertas y una zona de petanca. El centro es totalmente accesible para personas con discapacidad física y está situado próximo a medios de transporte público como metro y autobús.

El presidente de Caja Madrid, Rodrigo Rato,  ha destacado en la inauguración del centro que:

“Esta participación de Caja Madrid se enmarca en el programa de construcción de ‘centros singulares’ de nuestra Obra Social. A través de la iniciativa colaboramos en la creación de diez nuevos centros similares a éste dirigidos a diferentes colectivos como personas sin hogar, con daño cerebral adquirido, autismo, síndrome de Down, parkinson, entre otros. Son centros que tratan de mejorar la especialización asistencial en el tejido social de Madrid”.

Por su parte el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, resaltó que:

“La suma de esfuerzos del Ayuntamiento de Madrid, de Caja Madrid y de la Fundación Padre Garralda-Horizontes Abiertos, es decir, de la Administración local, los agentes económicos y la propia sociedad civil, es la que ha permitido que esta ciudad cuente con un nuevo recurso que hace de Madrid una metrópoli que trabaja a favor de la cohesión social, que combate activamente la marginación, y que se esfuerza por ofrecer oportunidades reales de integración”.