La fisioterapia puede mejorar los tratamientos en la enfermedad de Parkinson

Foto de una persona recibiendo un masajeEl Parkinson es la segunda enfermedad neurodegenerativa más común en España. Aproximadamente, afecta a un 2% de la población mayor de 65 años y al 0,4% de la población mayor de 40.

Los síntomas que presentan los pacientes son temblor de manos, brazos, piernas y cabeza. También se da la rigidez de extremidades y tronco y lentitud en algunos movimientos. Todo ello lleva a adquirir una inestabilidad postural y deterioro del equilibrio. Y aquí es donde, según los expertos, entra en juego la fisioterapia.

Mediante la ayuda de un fisioterapeuta, se puede retrasar la progresión de la enfermedad, mejorando su movilidad, flexibilidad y su fuerza corporal. Esto se consigue con el trabajo con los músculos rígidos del paciente, corrigiendo la postura y dotándolo de más equilibrio.

Y no solo mejora la parte muscular. Con el tratamiento de fisiterapia se puede mejorar el bienestar emocional y, con ello, aumentar sus niveles de compuestos beneficiosos en el cerebro llamados factores neurotróficos.

Para completar estas mejoras, se recomienda que el paciente realice actividades físicas como caminar, nadar o acudir al gimnasio, para contribuir a un envejecimiento activo que ayude a paliar los síntomas de Parkinson.