Cuidado con Internet a la hora de tratar el Alzheimer

Imagen de una probetaSi tienes algún familiar con Alzheimer o Parkinson, te recomendamos que tengas cuidado con la información que encuentres sobre estas enfermedades en Internet. Para reconocer si es o no fiable el sitio donde estás mirando, puedes fijarte por ejemplo de si la información viene respaldada por algún estudio, investigación, centro especializado o universidad. También si el trabajo o la investigación se ha publicado en alguna revista especializada. Eso te puede dar una pista de que es información veraz.

Lo mismo ocurre con la medicación que se está vendiendo para estas afecciones en algunas páginas web. Desde aquí te pedimos el máximo cuidado: no compres fármacos por esta vía a no ser que estés convencido de su certificación. El médico es quien mejor te puede aconsejar al respecto, y las medicinas que él te dará seguramente serán las más adecuadas para el enfermo. Recuerda que las recetas prodigiosas no existen.

Y al hilo de esto y sin ánimo de querer preocuparte sino de informarte, te quería comentar que también pongas ‘en cuarentena’ los test genéticos que se ofertan en la Red, sobre todo aquellos que aseguran que pueden predecir el riesgo de una persona de desarrollar ciertas enfermedades en el futuro. Según el Consejo de Bioética Nuffield, del que forma parte un importante elenco de médicos expertos en ética de Reino Unido, pueden resultar pocos fiables y dar resultados que no son  certeros.

Los test genéticos parecen sencillos: normalmente se comercializan para que personas en buen estado de salud sepan si son susceptibles de padecer enfermedades no sólo como el Parkinson o el Alzheimer, sino otras como la diabetes, enfermedades cardiacas  o incluso el cáncer.

La metodología que utilizan suele ser sencilla: te piden una muestra de ADN (en general saliva) que se manda vía correo a la empresa y en poco tiempo obtienes la respuesta. Pues bien, según este comité, esos resultados en general no sirven para gran cosa.

Por ello, han pedido a los gobiernos que conciencien a la población sobre los riesgos de estos productos. En concreto han pedido también al Gobierno británico que acredite y certifique cuáles de todos los chequeos on line que uno se puede encontrar son realmente fiables y cuáles no lo son.