La diversidad es fuerza, según Odile Rodríguez de la Fuente

Odile Rodríguez de la Fuente y su padre en una foto, detrás de ella
Foto: FFRF

La conectividad social, la pasión y la bioinspiración, enraizados en la sabiduría de la comunicación de las tradiciones y aplicando las tecnologías más innovadoras, son los mecanismos “necesarios para concienciar al público y conseguir que se implique en el cambio para que mejore y enriquezca la vida del hombre y el medio ambiente que lo sustenta”.

Así lo aseguró la directora general de la Fundación Félix Rodríguez  de la Fuente (FFRF), Odile Rodríguez de la Fuente, en una ponencia realizada durante la conmemoración del 125 aniversario de la ‘National Geographic Society’, mientras explicaba cómo el legado de su padre sigue influyendo en la visión actual de la conservación.

Parece ser, apuntaba la directora de la FFRF en su intervención, que el Paleolítico fue “la infancia de la humanidad” y el Neolítico, “la adolescencia”. Justo en este último es donde se cometieron numerosos “errores fruto de la inconsciencia y el empoderamiento desmesurado”.

Sin embargo, añadió, “hoy nos encontramos en la encrucijada en la que el hombre puede optar por una madurez en la que recoja la sabiduría de la infancia y la experiencia de los errores y aciertos de la pubertad, o por el contrario, continuar con una actitud inmadura e inconsciente propia de esta etapa que solo nos llevará a la autodestrucción”, continuó.

Al hilo de esta introducción, Rodríguez de la Fuente apostó por generar movimientos “constructivos y no destructivos”, ya que “no hay tiempo para luchar contra el sistema y los retos ante los que nos encontramos exigen creatividad y cooperación, si queremos llegar a una nueva etapa de armonía y madurez”.

Por ello, la experta defiende que “la diversidad es fuerza” y que “sistemas diversos con muchas conexiones y escalas son la clave a la resiliencia”. Y es que, anuncia Odile Rodríguez de la Fuente, “desde la Fundación que dirijo trabajamos para incrementar la conciencia de la ciudadanía en pos de construir una sociedad nueva en la que la naturaleza y sus valores sean un pilar del desarrollo cultural, económico y espiritual”.

En este sentido, recalcó durante su discurso que desde la FFRF “estamos construyendo proyectos trasversales y resilientes basados en la cooperación interdisciplinar, creando soluciones que beneficien a todos los implicados y firmemente enraizadas en valores que emanan de la naturaleza”.

Además, la directora de la entidad recordó que la clave del éxito fue conseguir desvelar, mediante la alimentación directa de mente a mente, “nuestra propia naturaleza humana a través del espejo de la naturaleza”. Porque, insistió, “Félix hizo que viéramos que nos regimos por esos mismos principios de complejidad, interconexión, belleza, equilibrio, resiliencia, superación, emoción, supervivencia y cooperación, entre otros valores”.