Los problemas de integración de los inmigrantes en Europa

En el año 2013, la cifra de inmigrantes residentes en la Unión Europea ascendía a 52 millones de personas; o lo que es lo mismo, una décima parte de la población total. Este segmento no ha hecho más que crecer durante las últimas décadas; sin embargo, ese crecimiento no ha estado acompañado por un progreso proporcional en materia de integración. Es la principal conclusión que arroja un reciente estudio sobre este tema realizado en los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y la UE.

Son varios los indicadores que sostienen esta afirmación. La tasa de paro de los inmigrantes en la Unión Europea es de un 16% en datos de 2012/13, lo que supone seis puntos más que la media continental. España es el país donde se registran las diferencias más amplias entre nacionales y foráneos. Según leemos en El País, los inmigrantes que viven en Europa también tienen el doble de posibilidades de ser pobres y de vivir en condiciones de hacinamiento.

Además, los hijos de estas familias se enfrentan prácticamente a las mismas dificultades que sus padres, incluso habiendo nacido en el Viejo Continente. España también ocupa el desafortunado primer puesto en cuanto a tasa de desempleo de jóvenes con padres inmigrantes, con un 48%. Si bien es cierto que los datos demuestran que los niveles de integración de estas familias mejoran a medida que pasa el tiempo, el ritmo es todavía demasiado lento; por lo que se ven obligadas a someterse a un proceso largo y marcadamente duro hasta alcanzar el bienestar.

El estudio también confirma que un nivel educativo alto facilita la integración en el mercado de trabajo. Un tercio de los inmigrantes en edad laboral en la OCDE y un 25% de los residentes en la UE cuenta con un título universitario; y aunque obviamente resulta de ayuda a la hora de encontrar empleo, la realidad es que topan con más problemas que los habitantes nacionales con titulaciones equivalentes.

A pesar de todo, aquellos inmigrantes que completan sus estudios en su país de destino multiplican sus posibilidades de obtener un puesto de trabajo ajustado a su formación. Por eso la Fundación Montemadrid cuida de manera muy especial un centro como el Padre Piquer, con un 45% de alumnos inmigrantes de 30 nacionalidades distintas, pero con nada menos que un 85% de éxito escolar. Seguramente, en el modelo formativo de este centro estén muchas de las claves que pueden llevar a los países de OCDE y UE a mejorar en cuanto a integración de inmigrantes, algo que tendría repercusiones económicas y sociales positivas para el conjunto de la población. En este post te hablamos del trabajo que se lleva a cabo en el Padre Piquer, distinguido por Ashoka como colegio ‘Changemaker’.

Haz click aquí para ver un resumen de este estudio sobre integración de inmigrantes, en castellano. El estudio completo, que puedes consultar aquí, está disponible en inglés.

Este vídeo resume varias de las conclusiones del reporte. Aunque está también en inglés, puedes ir a las opciones para activar los subtítulos, que te ayudarán a comprenderlo más fácilmente.